jueves, 14 de noviembre de 2013

¿Más vale tarde que nunca?

Por: Sarai Leetch



El fútbol es un deporte mundial, que emociona, entretiene y divierte a todas aquellas personas aficionadas a dicho deporte. Uno de los deportes que generan más dinero y más espectadores sin duda alguna, es por ello que hoy quiero hablar de “La Selección mexicana”.

Ya he visto y leído mucho acerca de las opiniones que tienen las personas de nuestra selección mexicana en estos momentos, desde el sobrenombre que le han puesto, “la decepción mexicana”, o aquellos que dicen: qué vergüenza que llegara hasta el repechaje para poder clasificar al Mundial 2014 que se celebrara en Brasil, también existen muchas otras personas que dicen, “Que feo es ver al pueblo manipulado y emocionado por un partido de fútbol”. Y es válido opinar acerca de esta situación que se está viviendo, todos esos comentarios y memes que se han subido a las redes sociales tienen un dejo de rabia, alegría, burla, pasión, que tienen los mexicanos acumulada. 


Estoy totalmente de acuerdo en que los medios de comunicación nos mantienen manipulados con este tipo de eventos, que decir de Televisa, que se vio beneficiada con el hecho de que “El Piojo Herrera” se eligiera como el nuevo director técnico debido al “malísimo”  papel que realizó Vucetich en la “selecta”. Fue un anillo al dedo para Televisa y para el entrenador del “América” que sin remordimientos izo a un lado a los jugadores Internacionales como Giovani Dos Santos y “El Chicharito” las promesas mexicanas ¡Según!.

La selección mexicana tuvo un papel espantoso, decadente y despreciable en la ronda futbolista para pasar de forma directa al mundial, con jugadores individualistas y el conformismo a flor de piel. Un juego que desilusiono a los amantes del fútbol,  un equipo que quedo mucho a deber, futbolistas “preparados” que no supieron jugar al balón, entrenadores que no supieron hacer la jugada. Pero entre tanta mala leche, encontramos a un jugador que siempre lo dio todo por el equipo, que nunca dejo el hambre de victoria y de superación, si señores, estoy hablando nada más ni nada menos que ¡Oribe Peralta!

Pero si bien el inicio de la trayectoria futbolera de la selección no fue aplaudible ni agradable, llegó el momento de sacar la victoria, que es denigrante el hecho de que tuvieran que llegar hasta el repechaje, con un favor de los estadounidenses que nos dieron el pase, hay que aplaudir el hecho de que futbolistas de la talla de Peralta se desvivan en el campo para darle una esperanza a los miles de mexicanos que amamos el fútbol.

Todas aquellas críticas que le han hecho al equipo son ciertas, y que muchos digan que para qué ir al mundial si solo irán a dar pena, puede que tengan razón o puede que no. Lo que se tiene que pensar ahora es no dejarse vencer, no confiarse e ir por el segundo juego, el de visitante, para que México esté dentro del mundial.


Yo me pongo a pensar en lo que hubiera pasado si la Selecta mexicana no hubiera ido al mundial, una humillación más, un desagradable acontecimiento, un sabor amargo para los mexicanos, es cierto y muchas personas objetivas dirán… El pueblo como siempre manipulado por un simple partido, pero la realidad es que, como país, el asistir o no al mundial nos pega fuerte.
Es una aventada de madre, porque así como ahora “El Piojo” es el héroe, ¿Cómo saber si la federación de fútbol no arreglo el juego?, para todos aquellos que piensan que el equipo mexicano-americanista gano por su buen desempeño, ¿Cómo estar seguros si en realidad fueron ellos la salvación o simplemente fueron un títere más de la burocracia?

La realidad es que muchas empresas quizás ya no pierdan todo el dinero que invirtieron, ni aquellas personas que ya habían comprado su boleto con anticipación. Ya no abra personas que se queden sin comer por la desdicha de no ir. En fin, es una cosa con otra, un circo con fines lucrativos y emocionales que nos unen, que nos unen a una patria que hoy en día no es más que una bazofia por todo lo que nos ha hecho el gobierno, es una distracción que nos hace manipulables, pero que también, muy en el fondo nos llena de orgullo. Y dirán, no de orgullo no, pero tal vez fuera una aventada de madre que tuviéramos que llegar a estas instancias para poder ir al mundial, pero que sabemos, que de todos los países del mundo, México aunque este en último, está dentro de los 32 que participaran dentro de este evento.

A lo mejor con esta nueva selección, con un equipo integrado, con jóvenes que tengan hambre de victoria y que no sean conocidos internacionalmente se pueda hacer un buen papel…

Información basada en mi opinión.

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